-Qué -Atendí cortante.
-Estás en casa ya? -Preguntó como si no le interesaran mis pocas de hablar.
-Te importa?
-Puedes dejar de portarte como una niña pequeña? -Se irritó.
-Y tú como un estúpido celoso? -Reproché- para qué llamaste? Para decirme que llegarás mas tarde para estar con Ashley? Para hacerme saber lo bien que te lo pasas? Para decirme que las cosas pasan por alguna razón? -Aquella sucesión de preguntas sin sentido estalló dentro de mi de una forma repentina.
-Sabes para qué llamo? Llamo para decirte que si quedé con Ashley fue para olvidarte, llamo para decirte que estoy en el parque echándote de menos, llamo para decirte que te quiero aquí conmigo, pero parece ser que ya esto no te importa lo más mínimo.
Sus palabras me asombraron, no pensaba que fuera a decir aquello. Nos quedamos en silencio, con el auricular en la oreja, escuchando la respiración de el otro. Era un silencio incómodo y lleno de arrepentimiento por parte de ambos tras la forma en la que nos hablamos.
-Lo siento... -Me animé a decir por fin.
Deseaba con todo mi ser pedirle perdón, pero aquel no era el momento, y no estaba segura de si por fin había aprendido la lección.
-Estoy en el parque, cerca de donde me viste con Ashley. Si te importo...ven. Si no, es hora de pasar página.
[NARRA LAUREN]
-Liam -Dije.
-Qué? -Sonrió apartando la vista del televisor.
-Tonto.
Dejé pasar unos segundos.
-Liam -Repetí.
-Qué? -Sonrió otra vez.
-Feo -Reí.
Volví a hacer lo mismo, perdiendo unos segundos antes de continuar con la bromita.
-Liam.
-Qué? -Preguntó creyendo saber la respuesta.
-Te quiero.
Me acerqué a él y le robé un beso.
Estábamos tumbados en mi cama. Harry, Louis y Aelyn seguían abajo y Niall había ido a la habitación de Catherine.
Veíamos la tele, más bien, estaba encendida sin razón alguna, por el simple echo de tener algún lugar donde apoyar la vista, porque ninguno de los dos se enteraba de las imágenes que salían allí. En ese momento era más importante estar juntos, que el amor que sentíamos no se esfumara y que la llama de nuestra velita, durara para siempre.
Yo estaba acurrucada en su pecho, él con su brazo, me rodeaba el hombro.
-Eres un soso Liam Payne.
Se hizo el sorprendido y apartó el brazo que me rodeaba.
-Déjame. -Se hizo el enfadado, pero podía aún notar que se le escapaba una sonrisilla.
-Ah si? Eso quieres? -Pretendí hacerme la chula.
-Si.
Me encerré en el baño. Cuando pasaron unos minutos decidí salir. Él estaba otra vez acostado en la misma posición. Me acosté a su lado sin decir palabra, cogí el mando y empecé a hacer zapping.
En un momento, sentí su mirada observándome, lo que me ruborizó y me hizo esbozar una pequeña sonrisa. Pasó un largo rato y él no apartaba la mirada, algo de mi le tenía totalmente abducido.
Por algún extraño motivo, empecé a reír, no se si fue sus ojos que seguían mis movimientos, o si fue alguna bobada de la tele, y estallé entre risas. Él se contagió y nos hayamos los dos entre un vaho de carcajadas.
-Por qué nos reímos? -Pregunté intentando respirar.
-No lo se, eres tú así de tonta -Dijo.
Negué con la cabeza tomándomelo a broma.
-Te amo mucho -Habló más calmado llevándome hacia él con su mano en mi mejilla.
Los dos sentados en medio de la cama, nos fuimos acercando, hasta que nuestras narices se rozaran.
-Te voy a extrañar más de lo que te imaginas -Le miré fijamente a los ojos.
-Te juro que te llamaré todos los días, que te mandaré cartas, haré vídeos, sacaré fotos, haré lo que sea para que pienses que estoy aquí contigo.
Tragué saliva. Se me había formado un nudo en la garganta. Ya no le encontraba gracia a nada, estabamos serios, pensativos, mirándonos fijamente a los ojos, cerca, muy cerca.
-Pero aún sigo aquí, y tú conmigo. -Dijo.
Acabamos con la distancia que había y nos besamos. Esos momentos son los que le hacen maravillosos, sus caricias, sus miradas, sus formas de tratarme cual princesa. Increíble.
Cada vez el beso se hacía más duradero y más apasionado. Nos acabamos tumbando otra vez en la cama. Su cuerpo estaba encima del mío, apretándome, elevando la temperatura, haciéndome pasar de princesa, a reina.
-Gracias. -Me separé un momento.
- A ti.
Y ahora si las distancias se acabaron definitivamente entre nosotros. La ropa, junto con nuestros pensamientos voló. Me dejé llevar, tal y como lo hacía cuando estaba con él. Aquellos brazos, aquellos besos...me perdían. Nos desvanecimos entre el roce y el calor de nuestra propia piel, hasta llegar a ser solo uno.
lunes, 28 de mayo de 2012
viernes, 25 de mayo de 2012
Capítulo 95
Llegué a mi habitación y me senté en la cama y cogí el portátil que llevaba en la mesilla de noche desde el día que me mudé. Lo abrí y lo primero que hice fue entrar en twitter, mis menciones al igual que mis seguidores se dispararon. La mayoría de mis mensajes, hablaban de mi relación con Zayn, de qué había pasado entre nosotros... No sabía si contestar, y no lo hice, antes de nada entré al perfil de Malik.
"Si algo pasa, es por alguna razón" fue lo último que escribió. Miré los trends, no me extraño ver cuatro nombres realmente familiares allí: "Zayn and Ashley" "Catherine and Steven" , le di click al primero de éstos y comprobé como habían fotos de ellos por la calle. Me afectó más de lo que creía, aún ya habiéndolos visto en persona.
Cansada de perder más tiempo metida en mi cuenta sin hacer nada, decidí twittear. "Me caí de un tren en marcha, ya ningún otro vendrá a buscarme, los trenes están ya fuera de servicio". En un acto de masoquismo, empecé a mirar todas las fotos que la gente había colgado en la red mías junto a Zayn. Eran todas adorables, mágicas, cada imagen reflejaba un momento distinto a su lado, una mirada, una caricia diferente en cada situación. Las lágrimas recorrieron mis mejillas en un acto reflejo.
-Chucu chucu, chucu chucu, chucu chuchu, CHÚ, CHÚ -Oí un acento irlandés canturrear detrás de mi puerta.
Me sequé rápidamente las lágrimas, dejé el portátil encima de la cama y salí al pasillo.
Allí vi a Niall dando vueltas haciendo el ruido de un tren, al verme se paró en seco y empezó a reir.
-Este trenecillo no está fuera de servicio -Sonrió.
Al oír eso me abalancé sobre él y le abracé muy fuerte. Siempre estaba allí cuando más le necesitaba, intentando sacarme una sonrisa cada vez que me veía mal, era realmente impresionante como siempre conseguía hacerme feliz en los momentos en los que peor estaba.
-Pasa -Me hice a un lado para que entrara en mi habitación
Se sentó en la cama y yo me acosté a su lado. Podía verle desde abajo a causa de que el seguía erguido sentado con las piernas cruzadas en el colchón y yo tumbada. Sus labios, sus pestañas y su nariz sobresalía radiante. No podía entender como las chicas le podían odiar, es tan dulce, tan simpático... No hay nada malo que sacar en él.
-Niall, gracias por todo -Hablé mirando hacia el techo.
Se hizo un silencio que ninguno de los dos quiso interrumpir.
-Ay Catherine, si todas fueran como tú...
-Si todas fueran como yo serían unas estúpidas -Contesté inmediatamente.
-No lo serían -Dijo.
-Si, créeme que si.
-Y por qué?
-Porque soy estúpida , estúpida, estúpida. -Dije al recordar todo lo que había pasado.
-No contestaste a mi pregunta -Rió mirando hacia mi.
Reí ante aquel comentario, lo había vuelto a hacer, me había hecho sonreír otra vez.
-Gracias Nialler -Sonreí.
Se tumbó a mi lado y nos quedamos los dos mirando hacia el techo. Dejamos que pasara el tiempo, sin escuchar nada más que nuestra respiración.
-El techo está sucio -Rió al cabo de un rato.
-Eres estúpido -Bromeé.
En medio de un ataque de risa, por cosas sin sentido, mi móvil empezó a sonar. Estaba encima de la cama y palpé con la mano sin quitar la mirada del techo hasta encontrarlo. Levanté el teléfono encima de nosotros para ver quién llamaba. Era Zayn.
Miré inmediatamente hacia Niall para buscar una mirada de ayuda, y la encontré, habló con esos preciosos ojos azules, diciéndome que atendiera, y así hice.
[No se que demonios pasó que este capítulo se guardó encima de otro, D: ]
lunes, 21 de mayo de 2012
Capítulo 94
-Ese no es...? -Preguntó Steven
-Si, ese es Zayn -Contesté enfadada.
No podía creer lo que veía, era Ashley aqulla chica. Aquel pelo, aquellos ojos... sin duda era ella.
-Esa chica me suena...
-Si, seguramente. Se llama Ashley Adams... -Murmuré.
-Claro! Esa es cantante o algo así?
-Si, lo es.. -Contesté sin ninguna gana.
Les seguí con la mirada, estaba completamente segura de que Zayn había pasado por esa zona a drede.
.Me temo que esto no te está gustando... -Dijo Steven decepcionado al ver mi cara de tristeza.
-El qué? El estar contigo dices? -Me sorprendí claro que me esta gustando! Pero me acaba de tirar abajo verles juntos otra vez... -Dije señalándoles con la cabea.
-Quieres que lo hablemos? Te vendrá bien desahogarte.
-Me escucharías?
-Toda la noche si hace falta.
Sonreí al oír eso y nos apartamos hasta una placita, nos sentamos en un banco de madera lo más apartado posible de la gente.
-Por donde debo empezar? -Pregunté.
-Por donde quieras...
-Bueno, desde el principio. Espero no aburrirte.
-No lo harás -Sonrió para animarme.
-Antes de haber conocido a One Direction en persona, yo era una fan más. Un día conseguí unos pases VIPS junto con Lauren y bueno, cosas de la vida, me hicieron acabar con Zayn.
A lo que iba, siendo una fan dedicada, siempre acababas sabiendo con quién estaban los chicos, y habían rumores de que Zayn se veía con Ashley. Se twitteaban y habían fotos de ellos juntos, lo que apuntaba a que estaban en una relación, pero despuéd de que aquello apareciera, ella dijo no querer nada para centrarse en su carrera... Fue ahí cuando las directioners empezaron a enviarle odio por hacerle daño a Zayn...
Steven iba asintiendo a cada frase que decía.
-Ahora verles juntos me acaba de matar. Podía esperarme que él rehiciera su vida, pero tan rápido? Y con ella? -Suspiré- dicen que todo lo bueno se acaba, y fue culpa mía haber acabado con lo mejor que tenía.
-Lo dejasteis por ti? -Se sorprendió.
-En parte... Es largo de explicar, pero teníamos roces cada vez que salíamos o que algún chico hablaba conmigo. Zayn es muy protector y el día en el que me invitaste a bailar en el pub, fue donde la gota colmó el vaso y esa noche... Todo lo que teníamos se desmoronó.
Al acabar de hablar me quedé mirando a la oscuridad y dejé que las lágrimas resbalaran por mis mejillas. Oía a la gente hablar a mi alrededor, pero no era más que ruido. No quería oír nada ni ver a nadie. Solo deseaba estar sola en mi mundo, junto con Zayn, poder besarle, abrazarle, decirle que le quería... Le echaba tanto de menos... Pero todo se había acabado, todo por mi estúpida culpa.
-Digamos que yo fui esa gota, no?
-No te eches la culpa Steven.
-Zayn y tú no estáis por mi.
-No, Zayn y yo no estamos porque somos idiotas.
El sonrió y yo le sonreí. Tenía una sonrisa realmente bonita, verle así me hacía feliz a mi.
-Gracias por haber llegado y por escucharme.
-Gracias a ti.
Se acercó y me dio un abrazo.
-Es hora de que vuelva a casa -Hablé mirando mi gran reloj blanco.
-Te acompaño.
Nos levantamos y fuimos en silencio durante casi todo el camino.
-Crees... que algún día... tú y yo... -Habló parándose a cada palabra para pensar bien.
-Creo en pocas cosas. -Reí
-Como en qué?
-Que el amor es una mierda -Solté una carcajada.
-Depende quienes sean los enamorados...
-No hay parejas perfectas -Le contradije.
-La nuestra lo será algún día -Bromeó.
-Estás loco.
-Por ti -Contestó frenándome.
Me miró y se fue acercando más a mi. Quería besarle, era demasiado adorable, pero no en aquel momento. Tenía que dejar de besar a cada chico guapo que se me presentara, aunque lo quisiera.
Aparté la cara, no muy bruscamente, no quería que se sintiera mal.
-Lo siento Steven... no es el momento.
-Está bien.
Ahora si, hasta llegar a casa solo se oían nuestros pasos y nuestra respiración, junto con las voces de las personas que paseaban por allí.
Llegamos al complejo y le despedí delante de la entrada.
-Lo siento Steven, ya hablaremos -Me fui dándole un beso en la mejilla.
Entré en la casa, ignorando las atentas miradas que me seguían en el salón, al igual que todos los comentarios a los que no di importancia. Algún día esos comentarios me hubieran matado nada más oírlos, siempre quise que ellos me hablaran, y ahora que les tenía allí, deseaba que desaparecieran.
-Si, ese es Zayn -Contesté enfadada.
No podía creer lo que veía, era Ashley aqulla chica. Aquel pelo, aquellos ojos... sin duda era ella.
-Esa chica me suena...
-Si, seguramente. Se llama Ashley Adams... -Murmuré.
-Claro! Esa es cantante o algo así?
-Si, lo es.. -Contesté sin ninguna gana.
Les seguí con la mirada, estaba completamente segura de que Zayn había pasado por esa zona a drede.
.Me temo que esto no te está gustando... -Dijo Steven decepcionado al ver mi cara de tristeza.
-El qué? El estar contigo dices? -Me sorprendí claro que me esta gustando! Pero me acaba de tirar abajo verles juntos otra vez... -Dije señalándoles con la cabea.
-Quieres que lo hablemos? Te vendrá bien desahogarte.
-Me escucharías?
-Toda la noche si hace falta.
Sonreí al oír eso y nos apartamos hasta una placita, nos sentamos en un banco de madera lo más apartado posible de la gente.
-Por donde debo empezar? -Pregunté.
-Por donde quieras...
-Bueno, desde el principio. Espero no aburrirte.
-No lo harás -Sonrió para animarme.
-Antes de haber conocido a One Direction en persona, yo era una fan más. Un día conseguí unos pases VIPS junto con Lauren y bueno, cosas de la vida, me hicieron acabar con Zayn.
A lo que iba, siendo una fan dedicada, siempre acababas sabiendo con quién estaban los chicos, y habían rumores de que Zayn se veía con Ashley. Se twitteaban y habían fotos de ellos juntos, lo que apuntaba a que estaban en una relación, pero despuéd de que aquello apareciera, ella dijo no querer nada para centrarse en su carrera... Fue ahí cuando las directioners empezaron a enviarle odio por hacerle daño a Zayn...
Steven iba asintiendo a cada frase que decía.
-Ahora verles juntos me acaba de matar. Podía esperarme que él rehiciera su vida, pero tan rápido? Y con ella? -Suspiré- dicen que todo lo bueno se acaba, y fue culpa mía haber acabado con lo mejor que tenía.
-Lo dejasteis por ti? -Se sorprendió.
-En parte... Es largo de explicar, pero teníamos roces cada vez que salíamos o que algún chico hablaba conmigo. Zayn es muy protector y el día en el que me invitaste a bailar en el pub, fue donde la gota colmó el vaso y esa noche... Todo lo que teníamos se desmoronó.
Al acabar de hablar me quedé mirando a la oscuridad y dejé que las lágrimas resbalaran por mis mejillas. Oía a la gente hablar a mi alrededor, pero no era más que ruido. No quería oír nada ni ver a nadie. Solo deseaba estar sola en mi mundo, junto con Zayn, poder besarle, abrazarle, decirle que le quería... Le echaba tanto de menos... Pero todo se había acabado, todo por mi estúpida culpa.
-Digamos que yo fui esa gota, no?
-No te eches la culpa Steven.
-Zayn y tú no estáis por mi.
-No, Zayn y yo no estamos porque somos idiotas.
El sonrió y yo le sonreí. Tenía una sonrisa realmente bonita, verle así me hacía feliz a mi.
-Gracias por haber llegado y por escucharme.
-Gracias a ti.
Se acercó y me dio un abrazo.
-Es hora de que vuelva a casa -Hablé mirando mi gran reloj blanco.
-Te acompaño.
Nos levantamos y fuimos en silencio durante casi todo el camino.
-Crees... que algún día... tú y yo... -Habló parándose a cada palabra para pensar bien.
-Creo en pocas cosas. -Reí
-Como en qué?
-Que el amor es una mierda -Solté una carcajada.
-Depende quienes sean los enamorados...
-No hay parejas perfectas -Le contradije.
-La nuestra lo será algún día -Bromeó.
-Estás loco.
-Por ti -Contestó frenándome.
Me miró y se fue acercando más a mi. Quería besarle, era demasiado adorable, pero no en aquel momento. Tenía que dejar de besar a cada chico guapo que se me presentara, aunque lo quisiera.
Aparté la cara, no muy bruscamente, no quería que se sintiera mal.
-Lo siento Steven... no es el momento.
-Está bien.
Ahora si, hasta llegar a casa solo se oían nuestros pasos y nuestra respiración, junto con las voces de las personas que paseaban por allí.
Llegamos al complejo y le despedí delante de la entrada.
-Lo siento Steven, ya hablaremos -Me fui dándole un beso en la mejilla.
Entré en la casa, ignorando las atentas miradas que me seguían en el salón, al igual que todos los comentarios a los que no di importancia. Algún día esos comentarios me hubieran matado nada más oírlos, siempre quise que ellos me hablaran, y ahora que les tenía allí, deseaba que desaparecieran.
miércoles, 16 de mayo de 2012
Capítulo 93
-Qué pasó? -Me preguntó Steven
-Nada, idioteces...
-Bueno cuéntame, estudias, trabajas...?
-Estudio, bueno, teóricamente estudio. Llegué hace poco a Londres y me tengo que matricular aún -Reí.
-Ah, no eres de aquí?
-No, soy de Nottingham.
-Qué bonito! Me encanta ir allí -Sonrió.
Hablar de mi ciudad, me recordó que aún no había llamado a mi madre desde que llegué a la capital.
-Estuvimos hablando un largo rato. Pedimos dos cafés y dejamos que pasara el tiempo entre tema y tema.
-Ah, mira -Dije.
Saqué mi pierna por fuera de la mesa y le mostré los zapatos.
-WOW! Te quedan preciosos.
-Enserio, muchísimas gracias -Hablé sonrojándome - siempre quise unos así.
-Al parecer di con el talle indicado no?
-Si! Me sentí cual cenicienta -Bromeé.
-Quizás algún día yo sea el príncipe -Sonrió.
-Quizás algún día... -Le devolví la sonrisa.
Revolví el café hasta que se templara.
-Te apetece caminar un poco?
-Si, por favor. -Accedí.
Apenas eran las 23:30 cuando salimos de aquel bar. Caminamos a paso lento, mirando las vidrieras, tiendas y puestos que iban apareciendo.
-Y tú que haces con tu vida? -Pregunté.
-Estudio -Sonrió.
-Y no trabajas?
-No, la verdad que mucha falta no me hace...
-Un niño rico? -Me sorprendí.
-No me gusta que me llamen así... -Intentó no tomárselo mal.
-Ah , perdón...
-No pasa nada, me lo dicen a menudo. Mi padre es empresario y mi madre secretaria. Intento no ser un niño pijo, quiero que vean que soy alguien más... Salgo con mis amigos, andamos en bici.. Lo de siempre.
-En bici?
-Si -Volvió a sonreír.
Su sonrisa era tremendamente dulce, podía enamorar a cualquiera que él quisiera.
-Pero bici, de bici? O bici de verano azul?
-Bici de bici, es decir, biker.
-Vaaaaaaaaaaaya, pero qué tenemos aquí! -Reí.
Caminamos un largo rato. Fuimos agarrando más confianza, hasta que se animó a tomarme por la cintura. Pero no todo podía ser perfecto, claro que no. Tenía que aparecer Zayn para estropearlo todo, y no venía solo, claro que no...
[NARRA LAUREN]
-Liam, eres tonto -Dije acurrucada en su pecho, mientras él miraba la televisión.
-Por qué?
-Porque tienes tantas fans... Tantas chicas detrás tuya... Y me elegiste a mi. -Hablé pensando en todo aquello.
-No pienses en eso -Me levantó la cabeza con sus dedos- da igual todas las chicas que vea a diario, da igual, yo estoy enamorado de ti, y solo de ti.
Me dio un pequeño beso y dejó que me apoyara otra vez en su pecho.
-En serio, es tan loco todo...
-Lauren, eres una terca -Rió.
-Pero me quieres -Contesté levantando la vista.
-Obviamente -Sonrió.
Esta vez fui yo quien se levantó para besarle. Pasé mi mano por su cuello y le di un beso. Hacía tiempo que no nos mostrábamos cariño delante de los demás.
-Bueno, bueno, bueno, qué somos aquí eh?! -Dijo Louis cortándonos el royo.
-Ay Lou... -Contesté apartándome de Liam.
Miré a Aelyn y a Harry que estaban hablando juntos en un sofá, parecían haber agarrado gran confianza. Ella no estaba ruborizada, pero su sonrisa mostraba toda la emoción que tenía dentro.
-MIERDA YA!
Nos giramos a la vez, para oír como Zayn entraba dando un portazo.
-Zayn qué te pasa?! -Liam se levantó de un salto y fue tras él.
Malik no contestó, siguió andando en línea recta, desapareciendo por el jardín con Liam a su lado.
Seguí viendo la tele con Louis, el que le veía la gracia a cualquier estupidez.
-AAAAAAAAAAAAY LAURENCITA! -Dijo de pronto tirándose encima de mi.
-Loooooooooouis! -Contesté abrazándole.
Era genial que existieran personas como él, personas que te transmiten alegría con solo una sonrisa.
Estábamos hablando cuando llamaron a la puerta. Me levanté de sopetón, pensando que era Catherine, pero me había equivocado, claro que me equivoqué.
-Hola, está Zayn? -Habló con esa sonrisa falsa.
-Si. -Contesté lo más borde que pudo -Espera aquí, le llamo ahora.
-No puedo pasar? -Intentó entrar en nuestra casa.
-No, no puedes.
Me giré y cerré la puerta delante de sus narices. Fui hacia el jardín enfadada en busca de Zayn.
-Tú, chico, está Ashley en la puerta.
Zayn miró inmediatamente hacia mi, sabía que le hablaba a él.
-Nada, idioteces...
-Bueno cuéntame, estudias, trabajas...?
-Estudio, bueno, teóricamente estudio. Llegué hace poco a Londres y me tengo que matricular aún -Reí.
-Ah, no eres de aquí?
-No, soy de Nottingham.
-Qué bonito! Me encanta ir allí -Sonrió.
Hablar de mi ciudad, me recordó que aún no había llamado a mi madre desde que llegué a la capital.
-Estuvimos hablando un largo rato. Pedimos dos cafés y dejamos que pasara el tiempo entre tema y tema.
-Ah, mira -Dije.
Saqué mi pierna por fuera de la mesa y le mostré los zapatos.
-WOW! Te quedan preciosos.
-Enserio, muchísimas gracias -Hablé sonrojándome - siempre quise unos así.
-Al parecer di con el talle indicado no?
-Si! Me sentí cual cenicienta -Bromeé.
-Quizás algún día yo sea el príncipe -Sonrió.
-Quizás algún día... -Le devolví la sonrisa.
Revolví el café hasta que se templara.
-Te apetece caminar un poco?
-Si, por favor. -Accedí.
Apenas eran las 23:30 cuando salimos de aquel bar. Caminamos a paso lento, mirando las vidrieras, tiendas y puestos que iban apareciendo.
-Y tú que haces con tu vida? -Pregunté.
-Estudio -Sonrió.
-Y no trabajas?
-No, la verdad que mucha falta no me hace...
-Un niño rico? -Me sorprendí.
-No me gusta que me llamen así... -Intentó no tomárselo mal.
-Ah , perdón...
-No pasa nada, me lo dicen a menudo. Mi padre es empresario y mi madre secretaria. Intento no ser un niño pijo, quiero que vean que soy alguien más... Salgo con mis amigos, andamos en bici.. Lo de siempre.
-En bici?
-Si -Volvió a sonreír.
Su sonrisa era tremendamente dulce, podía enamorar a cualquiera que él quisiera.
-Pero bici, de bici? O bici de verano azul?
-Bici de bici, es decir, biker.
-Vaaaaaaaaaaaya, pero qué tenemos aquí! -Reí.
Caminamos un largo rato. Fuimos agarrando más confianza, hasta que se animó a tomarme por la cintura. Pero no todo podía ser perfecto, claro que no. Tenía que aparecer Zayn para estropearlo todo, y no venía solo, claro que no...
[NARRA LAUREN]
-Liam, eres tonto -Dije acurrucada en su pecho, mientras él miraba la televisión.
-Por qué?
-Porque tienes tantas fans... Tantas chicas detrás tuya... Y me elegiste a mi. -Hablé pensando en todo aquello.
-No pienses en eso -Me levantó la cabeza con sus dedos- da igual todas las chicas que vea a diario, da igual, yo estoy enamorado de ti, y solo de ti.
Me dio un pequeño beso y dejó que me apoyara otra vez en su pecho.
-En serio, es tan loco todo...
-Lauren, eres una terca -Rió.
-Pero me quieres -Contesté levantando la vista.
-Obviamente -Sonrió.
Esta vez fui yo quien se levantó para besarle. Pasé mi mano por su cuello y le di un beso. Hacía tiempo que no nos mostrábamos cariño delante de los demás.
-Bueno, bueno, bueno, qué somos aquí eh?! -Dijo Louis cortándonos el royo.
-Ay Lou... -Contesté apartándome de Liam.
Miré a Aelyn y a Harry que estaban hablando juntos en un sofá, parecían haber agarrado gran confianza. Ella no estaba ruborizada, pero su sonrisa mostraba toda la emoción que tenía dentro.
-MIERDA YA!
Nos giramos a la vez, para oír como Zayn entraba dando un portazo.
-Zayn qué te pasa?! -Liam se levantó de un salto y fue tras él.
Malik no contestó, siguió andando en línea recta, desapareciendo por el jardín con Liam a su lado.
Seguí viendo la tele con Louis, el que le veía la gracia a cualquier estupidez.
-AAAAAAAAAAAAY LAURENCITA! -Dijo de pronto tirándose encima de mi.
-Loooooooooouis! -Contesté abrazándole.
Era genial que existieran personas como él, personas que te transmiten alegría con solo una sonrisa.
Estábamos hablando cuando llamaron a la puerta. Me levanté de sopetón, pensando que era Catherine, pero me había equivocado, claro que me equivoqué.
-Hola, está Zayn? -Habló con esa sonrisa falsa.
-Si. -Contesté lo más borde que pudo -Espera aquí, le llamo ahora.
-No puedo pasar? -Intentó entrar en nuestra casa.
-No, no puedes.
Me giré y cerré la puerta delante de sus narices. Fui hacia el jardín enfadada en busca de Zayn.
-Tú, chico, está Ashley en la puerta.
Zayn miró inmediatamente hacia mi, sabía que le hablaba a él.
sábado, 12 de mayo de 2012
Capítulo 92
-Qué demonios quieres?! -Dije parándome en seco al reconocerle.
-Se puede saber qué haces? -Preguntó él.
-Qué hago yo? Qué haces tú, querrás dcir! -Elevé el tono de voz.
-Si, qué se supone que haces, y a dónde piensas que vas?
-Ya lo dije, a pasear -Mentí.
-Así vestida? -Me miró de arriba a abajo.
-Bueno qué pasa? No me puedo arreglar?
Miré disimuladamente hacia mi reloj, no quería llegar tarde.
-Qué miras? -Preguntó él al darse cuenta.
-La hora.
-Por qué? Llegas tarde para algo? -Preguntó sarcásticamente.
-Déjame en paz, no tengo que darte explicaciones.
-Si que tienes que darmelas!
-Si? Por qué? Te recuerdo que yo no soy nada tuyo, Zayn.
Esas palabras me dolieron hasta a mi. En el fondo le amaba, mi corazón y mi cuerpo pedían a gritos volver a estar con él. Pero situaciones como esas, me echaban haca atrás.
Seguí caminando, dejando a Zayn atrás, iba a llegar tarde y no quería que Stever tuviera una mala imporesión mía, entonces aceleré el paso. Estaba a dos calles de llegar cuando una persona venía corriendo hacia mi. Otra vez Zayn.
-Cat, por favor no vayas!
-ME PUEDES DEJAR EN PAZ DE UNA VEZ?! -Grité haciendo que todos los que pasaban por alli se voltearan para mirarnos.
-No! NO PUEDO! -Contestó en el mismo tono de voz.
Lo único que quería en ese momento era echarme a llorar en su pecho, y sentirme protegida.
-Catherine? Catherine! -Oí detrás mía.
Me giré y vi a Steven.
-Me dejaste por este? -Habló señalando a Steven.
-Este tiene nombre -Respondió el chico.
-Zayn basta, no te dejé por este, no -Dije colocando mi mano en el brazo de Steven -Ya conseguiste romper nuestra relación, puedes dejar de romper las demás?!
Le noté muy cabreado y tras esto, se marchó dándole puñetazos al aire.
Mi corazón corría muy deprisa. ¿Le había perdido para siempre?
-Yo no quería que pasara esto... -Se disculpó Steven.
-No pasa nada -Intenté sonreír.
-Qué te parece si vamos a tomar algo y olvidamos lo ocurrido? -Ofreció.
-Me parece genial.
Llegamos a un pequeño bar y nos sentamos en las mesas exteriores. La noche era fresca, iluminada por las luces de las casas.
-Y cuantos años tienes? -Me preguntó.
-Es un dato irrelevante -Reí - tú?
-18 -Sonrió.
Era un chico realmente guapo, tenía el pelo corto y ondulado. Un flequillo no muy largo, le tapaba media frente. Su cabello era negro, al igual que sus ojos. Llevaba un piercing en la nariz, tal y como la noche que le conocí. En cada oreja tenía un agujero, de un antiguo pendiente que ya no llevaba puesto. Sus labios eran finos, y su sonrisa, tremendamente dulce.
-Entonces, Zayn es tu ex, no?
-Aham -Afirmé.
-Digamos que eres una chica muy envidiada.
-Era. -Le corregí - ahora voy a ser la más odiada -Intenté tomarlo con humor.
Mi móvil empezó a sonar.
-Un segundo -Hablé.
Miré el teléfono, era Lauren.
-Dime -Atendí.
-¿Dónde leches estás? Zayn acaba de llegar cabreadísimo, hablando de ti. Y ahora vino una chica a buscarle.
Una chica? Mi mente no procesaba más información, estaba a punto de estallar. Era él el que no quería que me fuera con otro chico, y ahora es Zayn el que queda con otra?
-Te llamo luego -Colgué irritada.
-Se puede saber qué haces? -Preguntó él.
-Qué hago yo? Qué haces tú, querrás dcir! -Elevé el tono de voz.
-Si, qué se supone que haces, y a dónde piensas que vas?
-Ya lo dije, a pasear -Mentí.
-Así vestida? -Me miró de arriba a abajo.
-Bueno qué pasa? No me puedo arreglar?
Miré disimuladamente hacia mi reloj, no quería llegar tarde.
-Qué miras? -Preguntó él al darse cuenta.
-La hora.
-Por qué? Llegas tarde para algo? -Preguntó sarcásticamente.
-Déjame en paz, no tengo que darte explicaciones.
-Si que tienes que darmelas!
-Si? Por qué? Te recuerdo que yo no soy nada tuyo, Zayn.
Esas palabras me dolieron hasta a mi. En el fondo le amaba, mi corazón y mi cuerpo pedían a gritos volver a estar con él. Pero situaciones como esas, me echaban haca atrás.
Seguí caminando, dejando a Zayn atrás, iba a llegar tarde y no quería que Stever tuviera una mala imporesión mía, entonces aceleré el paso. Estaba a dos calles de llegar cuando una persona venía corriendo hacia mi. Otra vez Zayn.
-Cat, por favor no vayas!
-ME PUEDES DEJAR EN PAZ DE UNA VEZ?! -Grité haciendo que todos los que pasaban por alli se voltearan para mirarnos.
-No! NO PUEDO! -Contestó en el mismo tono de voz.
Lo único que quería en ese momento era echarme a llorar en su pecho, y sentirme protegida.
-Catherine? Catherine! -Oí detrás mía.
Me giré y vi a Steven.
-Me dejaste por este? -Habló señalando a Steven.
-Este tiene nombre -Respondió el chico.
-Zayn basta, no te dejé por este, no -Dije colocando mi mano en el brazo de Steven -Ya conseguiste romper nuestra relación, puedes dejar de romper las demás?!
Le noté muy cabreado y tras esto, se marchó dándole puñetazos al aire.
Mi corazón corría muy deprisa. ¿Le había perdido para siempre?
-Yo no quería que pasara esto... -Se disculpó Steven.
-No pasa nada -Intenté sonreír.
-Qué te parece si vamos a tomar algo y olvidamos lo ocurrido? -Ofreció.
-Me parece genial.
Llegamos a un pequeño bar y nos sentamos en las mesas exteriores. La noche era fresca, iluminada por las luces de las casas.
-Y cuantos años tienes? -Me preguntó.
-Es un dato irrelevante -Reí - tú?
-18 -Sonrió.
Era un chico realmente guapo, tenía el pelo corto y ondulado. Un flequillo no muy largo, le tapaba media frente. Su cabello era negro, al igual que sus ojos. Llevaba un piercing en la nariz, tal y como la noche que le conocí. En cada oreja tenía un agujero, de un antiguo pendiente que ya no llevaba puesto. Sus labios eran finos, y su sonrisa, tremendamente dulce.
-Entonces, Zayn es tu ex, no?
-Aham -Afirmé.
-Digamos que eres una chica muy envidiada.
-Era. -Le corregí - ahora voy a ser la más odiada -Intenté tomarlo con humor.
Mi móvil empezó a sonar.
-Un segundo -Hablé.
Miré el teléfono, era Lauren.
-Dime -Atendí.
-¿Dónde leches estás? Zayn acaba de llegar cabreadísimo, hablando de ti. Y ahora vino una chica a buscarle.
Una chica? Mi mente no procesaba más información, estaba a punto de estallar. Era él el que no quería que me fuera con otro chico, y ahora es Zayn el que queda con otra?
-Te llamo luego -Colgué irritada.
miércoles, 9 de mayo de 2012
Capítulo 91
Se hizo de noche y comimos todos juntos, en la gran cocina. Era una de las partes más bonitas de la casa, era grande y de madera clara y nueva, con una isla en el centro. Al costado de la sala, una gran mesa de cristal rectangular acompañada de 12 sillas, adornaba la estancia. La nevera era plateada, a juego con la vitrocerámica. Todo estaba siempre muy limpio, a causa de su poco uso.
-Cat, me pasas el queso, porfas? -Me preguntó Aelyn sacándome de mis pensamientos.
-Si, claro -Sonreí pasándole el bote con el queso.
Entre las tres, habíamos conseguido preparar unos ricos fideos con pollo.
-Esto está riquísimo! -Exclamó Niall con la boca llena de comida.
Acabamos de cenar y nos quedamos sentados hablando un poco de todo.
-Te lo estás pasando bien, Aelyn? -Le preguntó Louis.
Ella ya no tan vergonzosa, asintió sonriente.
-Chicos, os puedo pedir una cosa? Pero solo si quereis... -Dijo mi nueva amiga.
-Si, por su puesto ! -Contestó Liam.
-Me podríais seguir en twitter? Digo, si no os impo...
-Si! Dánoslo! -Respondió Harry enseguida, dejándola con la frase a la mirad.
Harold había estado pensativo la mayoría de la cena, no le quitaba el ojo de encima a Aelyn, y su mirada solía estar perdida entre el pelo oscuro de ella.
Les dio su twitter y aproveché ese momento, en el que estaban todos pegados a su móviles, para levantarme de la mesa.
Fui en busca del sobre de Steven, que lo había guardado, junto con el paquete, en mi habitación. Lo abrí y sin pensarlo dos veces, marqué el número de teléfono que había escrito. Dejé varios tonos sonar, y no atendía nadie. Pensándolo mejor, no era buena idea llamarle, pero cuando iba a colgar; atendieron.
-Hola? -Oí al otro lado del teléfono.
-Hola, Steven?
-Si, quién habla?
-Catherine, Cat... La chica del pub a la que...
-Si, a la que le tiré la bebida -Rió cortándome.
-Esa misma -Reí.
-Que agradable sorpresa la de tu llamada! -Dijo.
-Más agradable fue tu carta!
Nos hablábamos omo si de amigos de toda la vida se ratase.
-Has visto el paquete? Espero que te sirvan...
-Oh no, no lo he visto, qué es?
-Míralo por ti misma.
Coloqué el móvil en mi hombro, y lo apreté con el moflete, me agaché despacito para que no se me callera, y abrí la gran caja. Dentro de esta, había un montón de papel de periódico roto.
-No! Odio estas cosas del os papelitos -Hablé entre risas.
-Busca al fondo -Contestó como si no hubiera oído lo que le había dicho.
Metí la mano hasta tocar algo, y saqué de allí una caja más pequeña metida en una bolsa. La saqué y la abrí.
-Ahwww, no, qué hermosos! Son un sueño, UN SUEÑO! No puedo aceptarlos... Ya mismo voy a devolverlos, te enviaré el dinero más tarde.
-Si que los vas a aceptar, créeme que los vas a aceptar.
-No te conozco Steven, y estos zapatos deben de costar mucho, y son muy difíciles de encontrar! Enserio, no puedo aceptarlos.
Efectivamente, eran unos zapatos, pero no unos zapatos normales, ni mucho menos. Eran de color plateado, totalmente recubiertos de diamantes, evidentemente, no de verdad. Siempre había querido tener unos así, de ensueño. La luz de la habitación se reflectaba en cada una de las piedrecitas, haciendo que brillaran de una forma hermosa.
-Por favor, acéptalos.
Me coloqué uno, y fue impresionante, notar como me calzaba. Justo mi medida, eran perfectos.
-Yo... no, no puedo, no puedo!
-Dejemos eso ya -Rió- me llamabas por algo en especial?
-Si, si te parecería bien salir hoy a la noche... conmigo.
-Enserio? Sería fantástico, pero solo saldré, si aceptas los zapatos...
Reí ante aquello y acepté. Preferí citarme con él en un café y después ir juntos, en vez de que me viniera a recoger.
Me lavé los dientes, duché, me peiné y me vestí. Dudé un gran rato en estrenar los zapatos, hasta que me engatusaron demasiado, y me los puse. Pensé en como reaccionaría Zayn al enterarse de que quedé con Steven, pero no le di importancia, él y yo ya no teníamos nada.
A la hora, bajé, haciendo un ruido tremendo en cada escalón que pisaba.
-Fiuuuuuuuuu fiuuuuuuuu -Silbó Niall.
-Calla rubito! -Bromeé ´
-A donde vas? -Preguntó Lauren.
-A dar un paseo, vuelvo en un rato. -Mentí.
Noté como la mirada de Zayn recorría cada detalle de mi cuerpo, de mi pelo y de mi ropa.
-NO ME LO PUEDO CREER, Y ESOS TACONES?! -Gritó Aelyn, y corrió hacia mi.
-Catherine?! Y esos zapatos?! -Se sorprendió Lauren al darse cuenta.
-Un bonito paquete los tenía dentro... -Lo dije descaradamente y miré a Zayn, para que se diera cuenta de qué paquete hablaba.
Cogí el bolso de la entrada, y salí. Me iba guiando por las explicaciones que Steven me había dado por teléfono.
Andaba mirándome a los pies, mis zapatos eran asombrosos, y no era la única que los miraba, un montón de chicas lo hacían descaradamente.
Estaba a punto de llegar, cuando vi una sombra detrás mía. Había notado algo detrás, pero no me atrevía a girarme, hasta que lo hice, pero no pude reconocer qué era. El miedo me pudo y empecé a andar más rápido. Y noté como alguien se acercaba a mi por la espalda.
-Cat, me pasas el queso, porfas? -Me preguntó Aelyn sacándome de mis pensamientos.
-Si, claro -Sonreí pasándole el bote con el queso.
Entre las tres, habíamos conseguido preparar unos ricos fideos con pollo.
-Esto está riquísimo! -Exclamó Niall con la boca llena de comida.
Acabamos de cenar y nos quedamos sentados hablando un poco de todo.
-Te lo estás pasando bien, Aelyn? -Le preguntó Louis.
Ella ya no tan vergonzosa, asintió sonriente.
-Chicos, os puedo pedir una cosa? Pero solo si quereis... -Dijo mi nueva amiga.
-Si, por su puesto ! -Contestó Liam.
-Me podríais seguir en twitter? Digo, si no os impo...
-Si! Dánoslo! -Respondió Harry enseguida, dejándola con la frase a la mirad.
Harold había estado pensativo la mayoría de la cena, no le quitaba el ojo de encima a Aelyn, y su mirada solía estar perdida entre el pelo oscuro de ella.
Les dio su twitter y aproveché ese momento, en el que estaban todos pegados a su móviles, para levantarme de la mesa.
Fui en busca del sobre de Steven, que lo había guardado, junto con el paquete, en mi habitación. Lo abrí y sin pensarlo dos veces, marqué el número de teléfono que había escrito. Dejé varios tonos sonar, y no atendía nadie. Pensándolo mejor, no era buena idea llamarle, pero cuando iba a colgar; atendieron.
-Hola? -Oí al otro lado del teléfono.
-Hola, Steven?
-Si, quién habla?
-Catherine, Cat... La chica del pub a la que...
-Si, a la que le tiré la bebida -Rió cortándome.
-Esa misma -Reí.
-Que agradable sorpresa la de tu llamada! -Dijo.
-Más agradable fue tu carta!
Nos hablábamos omo si de amigos de toda la vida se ratase.
-Has visto el paquete? Espero que te sirvan...
-Oh no, no lo he visto, qué es?
-Míralo por ti misma.
Coloqué el móvil en mi hombro, y lo apreté con el moflete, me agaché despacito para que no se me callera, y abrí la gran caja. Dentro de esta, había un montón de papel de periódico roto.
-No! Odio estas cosas del os papelitos -Hablé entre risas.
-Busca al fondo -Contestó como si no hubiera oído lo que le había dicho.
Metí la mano hasta tocar algo, y saqué de allí una caja más pequeña metida en una bolsa. La saqué y la abrí.
-Ahwww, no, qué hermosos! Son un sueño, UN SUEÑO! No puedo aceptarlos... Ya mismo voy a devolverlos, te enviaré el dinero más tarde.
-Si que los vas a aceptar, créeme que los vas a aceptar.
-No te conozco Steven, y estos zapatos deben de costar mucho, y son muy difíciles de encontrar! Enserio, no puedo aceptarlos.
Efectivamente, eran unos zapatos, pero no unos zapatos normales, ni mucho menos. Eran de color plateado, totalmente recubiertos de diamantes, evidentemente, no de verdad. Siempre había querido tener unos así, de ensueño. La luz de la habitación se reflectaba en cada una de las piedrecitas, haciendo que brillaran de una forma hermosa.
-Por favor, acéptalos.
Me coloqué uno, y fue impresionante, notar como me calzaba. Justo mi medida, eran perfectos.
-Yo... no, no puedo, no puedo!
-Dejemos eso ya -Rió- me llamabas por algo en especial?
-Si, si te parecería bien salir hoy a la noche... conmigo.
-Enserio? Sería fantástico, pero solo saldré, si aceptas los zapatos...
Reí ante aquello y acepté. Preferí citarme con él en un café y después ir juntos, en vez de que me viniera a recoger.
Me lavé los dientes, duché, me peiné y me vestí. Dudé un gran rato en estrenar los zapatos, hasta que me engatusaron demasiado, y me los puse. Pensé en como reaccionaría Zayn al enterarse de que quedé con Steven, pero no le di importancia, él y yo ya no teníamos nada.
A la hora, bajé, haciendo un ruido tremendo en cada escalón que pisaba.
-Fiuuuuuuuuu fiuuuuuuuu -Silbó Niall.
-Calla rubito! -Bromeé ´
-A donde vas? -Preguntó Lauren.
-A dar un paseo, vuelvo en un rato. -Mentí.
Noté como la mirada de Zayn recorría cada detalle de mi cuerpo, de mi pelo y de mi ropa.
-NO ME LO PUEDO CREER, Y ESOS TACONES?! -Gritó Aelyn, y corrió hacia mi.
-Catherine?! Y esos zapatos?! -Se sorprendió Lauren al darse cuenta.
-Un bonito paquete los tenía dentro... -Lo dije descaradamente y miré a Zayn, para que se diera cuenta de qué paquete hablaba.
Cogí el bolso de la entrada, y salí. Me iba guiando por las explicaciones que Steven me había dado por teléfono.
Andaba mirándome a los pies, mis zapatos eran asombrosos, y no era la única que los miraba, un montón de chicas lo hacían descaradamente.
Estaba a punto de llegar, cuando vi una sombra detrás mía. Había notado algo detrás, pero no me atrevía a girarme, hasta que lo hice, pero no pude reconocer qué era. El miedo me pudo y empecé a andar más rápido. Y noté como alguien se acercaba a mi por la espalda.
domingo, 6 de mayo de 2012
Capítulo 90
Sin saber como reaccionar, me escondí rápidamente en la bañera, tapándola con la gran cortina azul.
Tuve el tiempo justo para acostarme en el frío material del que estaba echo, antes de que entrara Zayn.
Harry que al parecer se había quitado todo mientras yo entraba en la ducha, no sabía que decir.
-Y tú? -Oí a Zayn
-Yo qué? -Escuché a Harry nervioso.
-Qué haces así? No te habías duchado?
-Si, ya me sequé.. estaba.. bueno, da igual, qué querías? -Consiguió cambiar de tema Hazza.
-Ah.. es sobre una persona... -Contestó Zayn.
-Catherine?
-No, otra.
Esas palabras me dolieron, me dolieron mucho.
-Quién? -Preguntó Styles asombrado.
-Cámbiate y te cuento fuera -Con esto, Zayn salió del baño.
Harry me avisó de que ya se había vestido, y cuando noté que Zayn no volvía, me levanté de la bañera.
-Otra... -Murmuré.
-Lo siento...
-No tienes por qué sentirlo, no es culpa tuya -Intente no parecer muy afectada.
-Crees que tú y yo, podríamos...?
No le dejé acabar la frase, sabía que era lo que quería.
-No, Harry, No sería bueno, ni para ti, ni para mi.
-Si, es cierto.
Se peinó revolviéndose el pelo y me miró.
-Una última cosa -Dijo.
Se acercó rápidamente y me dio un beso corto en los labios.
-Ya está. Prometo no besarte nunca más.
Dejé que Harry saliera, y al rato lo hice yo. Bajé al salón donde estaban Louis, Niall, Liam y mis dos amigas.
-Hola preciosos! -Saludé pasando cerca del sofá.
Me miraron y contestaron a mi saludo con gritos similares.
-Lauren, dónde dejaste el paquete y la caja que nos llegó? -Le susurré acercándome detrás de ella.
-En un armario de la entrada.
Fui en busca del armario, lo reconocí enseguida, había visto a Lauren meter algo allí dentro justo cuando Aelyn había llegado. Abrí la puertecita y no encontré nada. Ni la caja ni la carta.
Sorprendida, rebusqué en los demás armarios y cajones que había alrededor. En un intento fallido de encontrarlo, fui a buscar a Lauren.
-Puedes venir un momento? -La avisé desde la entrada del salón.
Se levantó apoyando su mano encima de la pierna de Liam, para ayudarse.
-Dime -Habló cuando llegó a mi lado.
-En qué armario dices que estaba?
Fue convencida hasta el primero que había mirado yo, y se asombró al comprobar que allí no había nada.
-Yo lo metí aquí, sin duda alguna. -Dijo extrañada.
-Bueno, no importa, vuelve con ellos, voy ahora, a ver si lo encuentro.
Iba a bajar al sótano, que servía de despensa, ya que guardábamos toda la comida allí. Quizás alguien había llevado la caja, pensando que tenía botellas, pero al pasar delante de la cristalera que dejaba ver el patio, vi que me equivocaba. El paquete lo tenía Zayn.
Salí muy furiosa para buscar lo que me pertenecía.
-Ejem -Carraspeé. -qué es eso?
Zayn me miró y no contestó nada, le había pillado.
-Harry, me puedes devolver la carta por favor? -Pregunté al ver que estaba con el sobre en la mano.
Accedió a la primera y me la devolvió.
-Sabes Zayn? Si quieres coger algo, pides permiso primero. -Me agaché para levantar la caja de la hierba.
-Quién es ese chico, Cat? -Preguntó Zayn descaradamente.
-Quién es esa otra persona, Zayn?
Me giré irritada, una de las razones por la que lo dejamos, eran los celos, y al parecer él no había cambiado nada después de aquella conversación.
Tuve el tiempo justo para acostarme en el frío material del que estaba echo, antes de que entrara Zayn.
Harry que al parecer se había quitado todo mientras yo entraba en la ducha, no sabía que decir.
-Y tú? -Oí a Zayn
-Yo qué? -Escuché a Harry nervioso.
-Qué haces así? No te habías duchado?
-Si, ya me sequé.. estaba.. bueno, da igual, qué querías? -Consiguió cambiar de tema Hazza.
-Ah.. es sobre una persona... -Contestó Zayn.
-Catherine?
-No, otra.
Esas palabras me dolieron, me dolieron mucho.
-Quién? -Preguntó Styles asombrado.
-Cámbiate y te cuento fuera -Con esto, Zayn salió del baño.
Harry me avisó de que ya se había vestido, y cuando noté que Zayn no volvía, me levanté de la bañera.
-Otra... -Murmuré.
-Lo siento...
-No tienes por qué sentirlo, no es culpa tuya -Intente no parecer muy afectada.
-Crees que tú y yo, podríamos...?
No le dejé acabar la frase, sabía que era lo que quería.
-No, Harry, No sería bueno, ni para ti, ni para mi.
-Si, es cierto.
Se peinó revolviéndose el pelo y me miró.
-Una última cosa -Dijo.
Se acercó rápidamente y me dio un beso corto en los labios.
-Ya está. Prometo no besarte nunca más.
Dejé que Harry saliera, y al rato lo hice yo. Bajé al salón donde estaban Louis, Niall, Liam y mis dos amigas.
-Hola preciosos! -Saludé pasando cerca del sofá.
Me miraron y contestaron a mi saludo con gritos similares.
-Lauren, dónde dejaste el paquete y la caja que nos llegó? -Le susurré acercándome detrás de ella.
-En un armario de la entrada.
Fui en busca del armario, lo reconocí enseguida, había visto a Lauren meter algo allí dentro justo cuando Aelyn había llegado. Abrí la puertecita y no encontré nada. Ni la caja ni la carta.
Sorprendida, rebusqué en los demás armarios y cajones que había alrededor. En un intento fallido de encontrarlo, fui a buscar a Lauren.
-Puedes venir un momento? -La avisé desde la entrada del salón.
Se levantó apoyando su mano encima de la pierna de Liam, para ayudarse.
-Dime -Habló cuando llegó a mi lado.
-En qué armario dices que estaba?
Fue convencida hasta el primero que había mirado yo, y se asombró al comprobar que allí no había nada.
-Yo lo metí aquí, sin duda alguna. -Dijo extrañada.
-Bueno, no importa, vuelve con ellos, voy ahora, a ver si lo encuentro.
Iba a bajar al sótano, que servía de despensa, ya que guardábamos toda la comida allí. Quizás alguien había llevado la caja, pensando que tenía botellas, pero al pasar delante de la cristalera que dejaba ver el patio, vi que me equivocaba. El paquete lo tenía Zayn.
Salí muy furiosa para buscar lo que me pertenecía.
-Ejem -Carraspeé. -qué es eso?
Zayn me miró y no contestó nada, le había pillado.
-Harry, me puedes devolver la carta por favor? -Pregunté al ver que estaba con el sobre en la mano.
Accedió a la primera y me la devolvió.
-Sabes Zayn? Si quieres coger algo, pides permiso primero. -Me agaché para levantar la caja de la hierba.
-Quién es ese chico, Cat? -Preguntó Zayn descaradamente.
-Quién es esa otra persona, Zayn?
Me giré irritada, una de las razones por la que lo dejamos, eran los celos, y al parecer él no había cambiado nada después de aquella conversación.
miércoles, 2 de mayo de 2012
Capítulo 89.
-Harry haz el favor de irte... -Miré al suelo, para no chocar con su mirada y dejarme llevar.
-Dímelo mirándome a los ojos.
Levanté la cabeza y me encontré sus preciosos ojos, que se encontraban más verdes de lo normal.
-Dilo -Insistió.
No era capaz, realmente no quería que se fuera, en mi interior había algo que me retenía la voz para no dejarle marchar.
-Sabía que no podías -Dijo lleno de confianza.
-Te odio.
-Se que no lo haces.
Cerró la puerta con un empujón de sus pies, sin separarse ni un centímetro de mi.
-Por qué eres tan persistente? -Pregunté dando movimientos de negación, al darme cuenta que yo había perdido.
-Tú fuiste la que me animó a esto...
Sin pensarlo dos veces, se acercó, hasta acabar con la distancia. En un primer momento, coloqué mis manos contra su pecho, en un intento de separarlo, pero sus besos eran cada vez más profundos, y fue un intento fallido. Sus labios empapaban los míos suavemente. Yo estaba apoyada en el gran lavamanos, sus manos rodeaban mi cintura, y yo llevé las mías hasta su nuca, donde podía sentir sus rizos y su piel.
-Ves como no iba a ser tan malo? -Dijo muy despacio al separarse.
Se volvió a acercar. Esta vez me besó con más pasión. Sus manso se habían deslizado hasta conseguir levantar mis piernas para enrollarlas alrededor de su cintura, notaba como me estaba apretando con fuerza y sus besos iban cada vez más y más rápidos. Bajé mis manos hasta su pecho y le aparté.
-Harry, qué se supone que estás haciendo?
Miró hacia todos lados, él mismo se había dado cuenta de que se le estaba escapando aquella situación.
-Lo siento, pensé que podía, yo... -Dijo avergonzado.
-Listo ya está Harry, sabía que no tenía que pasar.
Me giré otra vez para verme en el espejo, me peiné, con su mirada atenta a todos mis movimientos.
-Eres tan perfecta... -Susurró.
Me volteé para verle.
-Tú también eres una persona perfecta. -Sonreí.
-Antes de que te vayas, déjame acabar esto por fin...
Me acercó hacia él con su mano en mi mejilla. Me dio dulces besos en los labios, llenos de obsesión, cariño y algo de tristeza, al saber que lo nuestro no podía ser nada más. Sus besos eran iguales de perfectos que él. Pensé que yo no estaba con Zayn y podía hacer lo que quería, así que le apreté más hacia mi, entrelazando mis manos alrededor de su cuello.
Justo en ese momento, en el que nada debía estar pasando, llamaron a la puerta.
-Harry? Harry estás aquí? -Era Zayn
Harold se separó rápidamente, me miró asustado. Los dos teníamos miedo de que nos encontrara.
Le hice una señal para que respondiera.
-S-s-si, estoy aquí -Tartamudeó.
-Estás bien? Necesito hablar contigo... -Dijo- puedo pasar?
-NO! -Respondió al instante de que Zayn formulara su pregunta- es que.. me acabo de duchar -Fue la más estúpida de sus ideas.
-Te veo siempre desnudo, venga...
Notamos como se apoyaba al pomo de la puerta para abrirlo.
-ESPERA POR FAVOR! -Gritó Harry haciendo todo lo posible para que no entrara.
[NARRA LAUREN]
-Chicos, sabéis donde está Harry? -Dijo Zayn al entrar en nuestra casa.
-Si, arriba -Contestó Louis.
Aelyn, Lou y yo seguíamos en el sofá, sentados los tres hablando de todo y nada a la vez.
-Y qué te trajo aquí? -Preguntó Louis.
-Un taxi -Bromeó ella
-La invité yo, Lou -Me metí mientras hablaban
-Muy buena idea -Sonrió -queréis que salgamos a tomar algo más tarde? -Propuso.
-Por mi perfecto -Accedió muy feliz.
Me levanté a traer una botella de agua, ya que estábamos todos muy sedientos.
-Qué te parece si voy a buscar a Niall y a Liam? -Le dije a mi amiga.
-Si? Por mi?! No quiero que les molestes... -Se sonrojó.
-Molestar? Niall debe estar pasando el tiempo mientras come, y Liam... seguramente haciendo twitcam -Soltó una carcajada Louis.
Salí a toda prisa a buscar a los chicos. Al llegar me abrió Liam, y me saludó con un beso.
-Hola bonita -Sonrió.
-Hola feo -Dije entre risas.
Pasé corriendo hasta encontrar a Niall.
-Tú y tú -Les señalé- a casita ahora.
-Y esta loca? -Se rió el rubio.
-Cállate, que hay una fan vuestra en casa, amiga mía. La habías subido tú al escenario creo... -Le contesté.
Me aferré de la mano de mi novio y salimos.
-Dímelo mirándome a los ojos.
Levanté la cabeza y me encontré sus preciosos ojos, que se encontraban más verdes de lo normal.
-Dilo -Insistió.
No era capaz, realmente no quería que se fuera, en mi interior había algo que me retenía la voz para no dejarle marchar.
-Sabía que no podías -Dijo lleno de confianza.
-Te odio.
-Se que no lo haces.
Cerró la puerta con un empujón de sus pies, sin separarse ni un centímetro de mi.
-Por qué eres tan persistente? -Pregunté dando movimientos de negación, al darme cuenta que yo había perdido.
-Tú fuiste la que me animó a esto...
Sin pensarlo dos veces, se acercó, hasta acabar con la distancia. En un primer momento, coloqué mis manos contra su pecho, en un intento de separarlo, pero sus besos eran cada vez más profundos, y fue un intento fallido. Sus labios empapaban los míos suavemente. Yo estaba apoyada en el gran lavamanos, sus manos rodeaban mi cintura, y yo llevé las mías hasta su nuca, donde podía sentir sus rizos y su piel.
-Ves como no iba a ser tan malo? -Dijo muy despacio al separarse.
Se volvió a acercar. Esta vez me besó con más pasión. Sus manso se habían deslizado hasta conseguir levantar mis piernas para enrollarlas alrededor de su cintura, notaba como me estaba apretando con fuerza y sus besos iban cada vez más y más rápidos. Bajé mis manos hasta su pecho y le aparté.
-Harry, qué se supone que estás haciendo?
Miró hacia todos lados, él mismo se había dado cuenta de que se le estaba escapando aquella situación.
-Lo siento, pensé que podía, yo... -Dijo avergonzado.
-Listo ya está Harry, sabía que no tenía que pasar.
Me giré otra vez para verme en el espejo, me peiné, con su mirada atenta a todos mis movimientos.
-Eres tan perfecta... -Susurró.
Me volteé para verle.
-Tú también eres una persona perfecta. -Sonreí.
-Antes de que te vayas, déjame acabar esto por fin...
Me acercó hacia él con su mano en mi mejilla. Me dio dulces besos en los labios, llenos de obsesión, cariño y algo de tristeza, al saber que lo nuestro no podía ser nada más. Sus besos eran iguales de perfectos que él. Pensé que yo no estaba con Zayn y podía hacer lo que quería, así que le apreté más hacia mi, entrelazando mis manos alrededor de su cuello.
Justo en ese momento, en el que nada debía estar pasando, llamaron a la puerta.
-Harry? Harry estás aquí? -Era Zayn
Harold se separó rápidamente, me miró asustado. Los dos teníamos miedo de que nos encontrara.
Le hice una señal para que respondiera.
-S-s-si, estoy aquí -Tartamudeó.
-Estás bien? Necesito hablar contigo... -Dijo- puedo pasar?
-NO! -Respondió al instante de que Zayn formulara su pregunta- es que.. me acabo de duchar -Fue la más estúpida de sus ideas.
-Te veo siempre desnudo, venga...
Notamos como se apoyaba al pomo de la puerta para abrirlo.
-ESPERA POR FAVOR! -Gritó Harry haciendo todo lo posible para que no entrara.
[NARRA LAUREN]
-Chicos, sabéis donde está Harry? -Dijo Zayn al entrar en nuestra casa.
-Si, arriba -Contestó Louis.
Aelyn, Lou y yo seguíamos en el sofá, sentados los tres hablando de todo y nada a la vez.
-Y qué te trajo aquí? -Preguntó Louis.
-Un taxi -Bromeó ella
-La invité yo, Lou -Me metí mientras hablaban
-Muy buena idea -Sonrió -queréis que salgamos a tomar algo más tarde? -Propuso.
-Por mi perfecto -Accedió muy feliz.
Me levanté a traer una botella de agua, ya que estábamos todos muy sedientos.
-Qué te parece si voy a buscar a Niall y a Liam? -Le dije a mi amiga.
-Si? Por mi?! No quiero que les molestes... -Se sonrojó.
-Molestar? Niall debe estar pasando el tiempo mientras come, y Liam... seguramente haciendo twitcam -Soltó una carcajada Louis.
Salí a toda prisa a buscar a los chicos. Al llegar me abrió Liam, y me saludó con un beso.
-Hola bonita -Sonrió.
-Hola feo -Dije entre risas.
Pasé corriendo hasta encontrar a Niall.
-Tú y tú -Les señalé- a casita ahora.
-Y esta loca? -Se rió el rubio.
-Cállate, que hay una fan vuestra en casa, amiga mía. La habías subido tú al escenario creo... -Le contesté.
Me aferré de la mano de mi novio y salimos.
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