Capítulo 108.

Catherine estaba metida en el agua cuando las antorchas que había por el jardín, se iban encendiendo una a una.
La punta de la nariz le goteaba, la ropa se le pegaba al cuerpo y le pesaba.
-Te gusta? -Preguntó Zayn encendiendo la última de todas.
Ella no sabía como reaccionar, si enfadarse, o ponerse contenta.
-Eh? -La presionó.
-Me ves contenta? -Fue lo primero que se le pasó por la cabeza.
-Uhm... te veo mojada y guapa. -Contestó Zayn intentando tomárselo a broma.
-Eres tonto o qué te pasa? Me preocupé enserio idiota. -Cambió ella de tema para no caer una vez más entre sus dulces palabras.
-No te enfades Cat...
Ella estaba a punto de salir cuando Zayn la frenó de un grito.
-Espera! -Gritó Zayn- no salgas aún.
-Qué quieres ahora? Empiezo a tener frío -Mintió Cat, que realmente sentía calor en aquella fresca noche.
-Ves eso? -Le preguntó señalando una caja metálica que había dentro de la piscina.
-Si.
Aquella caja metálica había sido la causante del ruido que Catherine confundió con el de Zayn tirándose al agua.
-Quiero que la abras. -Sonrió
-Y yo quiero ropa seca -Respondió con una sonrisa irónica.
-Por favor, ábrela.
Catherine puso los ojos en blanco, pero aun así hizo lo que él le pidió.
Se acerco, metió los brazos y la saco. Era del tamaño de una caja de zapatos. Fue hacia el borde de la piscina y la abrió.Dentro de ésta, había otra lata. Sacudió las manos para que no le resbalaran y la abrió cuidadosamente bajo la mirada expectante de Zayn.
-Y? Que? -Comentó él intentando sacarle alguna emoción.
-Para qué es?
-Ah,, esa es la segunda parte de la sorpresa.
Levantó la vista y observó como la miraba y le sonreía, con aquella sonrisa que tanto la enamoraba.
Zayn poco a poco se fue acercando a la piscina, donde ella seguía metida. Se sentó en el borde, mojándose las piernas, y luego, se soltó, quedando de pie al lado de su chica.
-Conseguí superar esto una vez, hacerlo por ti a la segunda, no me cuesta nada. -Dijo al ver la cara de sorpresa de Catherine.
-Se cuanto te asusta estar aquí metido, y no puedo explicarte cuanto significa para mi, que yo sea la causa de que tu intentes superar tus miedos.
-No hace falta palabras para explicarlo...
A cada palabra, se iban acercando un poco más.
La noche se había vuelto fría, pero aún allí metidos y empapados, sentían un calor tremendo. Sus cuerpos deseaban estar juntos otra vez, sentirse como antes, volver a tocarse, volver a ser uno.
-Quiero que esto sea como la primera vez, y que a partir de aquí, impidamos que nada nos separe.
-Primero vivamos este momento. -Sonrió Catherine picaramente- luego ya veremos.
Zayn lo entendió perfectamente y dejaron de hablar. Se fundieron en un tremendo beso.
Ya nada les importaba, ni aquel regalo, ni su significado, ni el estar empapados con la ropa pesándoles, ni las llamadas que Zayn no había echo, nada. Aquel momento no buscaba más preocupaciones, solo buscaba la pasión que hacía tiempo que se había perdido.